Acabo de instalar Colebuntu 12.04 rev. 5 con kernel de Linux 3.5.0-34 en el Toshiba NB510 de Irene, y compruebo que todo va estupendo hasta que reinicio y ¡horror! me encuentro con que después del GRUB sólo hay una pantalla negra al arrancar :-(
Investigo y veo que es un problema bastante extendido en Ubuntu con según que tarjetas gráficas como las últimas de Intel o algunas nVidia. Al parecer, en el inicio, se fija el brillo a 0, no reacciona a las teclas para modificarlo y se acabó, no se ve nada más.
Pero gracias al foro de askubuntu.com lo he solucionado en un plis-plás :-)
Es tan simple como:
arrancar el ordenador
cuando está en el GRUB podemos elegir que arranque en modo seguro o, si queremos hacerlo en modo normal, tecleamos la letra "e" cuando está seleccionado el arranque normal, borramos "$vt_handoff" de la línea donde aparece con "quiet splash...", y luego continuamos el arranque con F10 o Ctrl-X
Y ahora, desde el escritorio, podemos hacerlo definitivo escribiendo en un terminal:
sudo gedit /etc/default/grub
añadimos una línea con:
GRUB_GFXPAYLOAD_LINUX="auto"
guardamos
actualizamos el GRUB con:
sudo update-grub
y solucionado... espero ;-)